The Enigma of Saturno

    By Yura

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    02 Sep, 2023

    La familia Jone siempre había ostentado una reputación extravagante en la ciudad. Reconocidos por su comportamiento peculiar y su estatus social, se habían convertido en una especie de mito urbano.

    Leslie Jone, el miembro más joven de la familia, no era la excepción. Su extraña pasión por las criaturas marinas lo destacaba incluso entre su familia peculiar.

    La más notable de estas criaturas marinas era su mascota, un tritón llamado Saturno. Este ser acuático vivía en una gran pecera en el interior de la mansión Jone.

    Como era de esperar, Saturno era la estrella de la casa. Su belleza engañosa servía como un espectáculo impresionante para los invitados de la familia.

    A pesar de su apariencia encantadora, estaba bien documentado que los tritones, incluido Saturno, eran seres rebeldes, mentirosos y crueles.

    Pero para Leslie, Saturno era más que una simple mascota. Se sentía atraído por su belleza y le encantaba pasar tiempo a su lado, observándolo nadar en su pecera.

    A veces, Leslie sufría pequeños accidentes a manos de Saturno. En una ocasión, perdió un dedo debido a un mordisco de su amada mascota.

    Pero incluso estos incidentes no disuadían a Leslie. Continuó visitando a Saturno, atraído por la belleza del tritón y la emoción del peligro.

    Esto empezó a preocupar a la familia Jone. Alarmados por la obsesión de Leslie y los riesgos que eso conllevaba, trataron de mantenerlo alejado de Saturno.

    Pero Leslie era terco y no quería separarse de su mascota. A pesar de las advertencias de su familia, seguía visitando a Saturno.

    La fascinación de Leslie con Saturno comenzó a tomar un giro aún más oscuro. Empezó a anhelar ser devorado por su amado tritón.

    Esta idea se afianzó en su mente hasta convertirse en una obsesión. Día tras día, visitaba a Saturno, esperando que el tritón lo devorara.

    La familia Jone estaba aterrada. No sabían cómo manejar la creciente obsesión de Leslie y temían por su vida.

    Decididos a salvar a Leslie, planearon deshacerse de Saturno. Pero nadie en la familia tenía el coraje de enfrentarse al tritón.

    Mientras tanto, Leslie seguía visitando a Saturno, cada día más obsesionado con su deseo de ser devorado por el tritón.

    Saturno, por su parte, lo observaba con su mirada enigmática y nadaba agitadamente en su pecera, como si supiera lo que planeaba Leslie.

    Un día, Leslie sumergió su mano en la pecera, como una ofrenda a Saturno. El tritón se abalanzó sobre él, pero no lo mordió.

    En cambio, Saturno simplemente nadó alrededor de la mano de Leslie, jugueteando con sus dedos. Este acto desconcertó a Leslie, pero no disminuyó su obsesión.

    Los días pasaron y Leslie continuó con sus visitas a Saturno. A pesar del miedo de su familia, nunca perdió la esperanza de ser devorado por su mascota.

    Finalmente, la familia Jone ya no pudo soportarlo. Decidieron que debían deshacerse de Saturno para salvar a Leslie.

    Sin embargo, antes de que pudieran llevar a cabo su plan, Leslie hizo una sorprendente revelación. Había decidido dejar a la familia Jone.

    Expresó su deseo de explorar el mundo y su vasto océano, con la esperanza de comprender mejor a las criaturas marinas como Saturno.

    La familia Jone, aunque sorprendida, decidió apoyar la decisión de Leslie. Eso significaba que Leslie estaría lejos de Saturno y el peligro que representaba.

    En el día de su partida, Leslie se despidió de Saturno. Miró por última vez al tritón que nadaba en su pecera y se marchó con un pesar agridulce.

    Después de la partida de Leslie, la familia Jone decidió liberar a Saturno al mar. Se despidieron del tritón y esperaron que encontrara la felicidad en su verdadero hogar.

    Aunque liberaron a Saturno, la peculiar presencia del tritón continuó persistiendo en la mansión. Parecía que la sombra de Saturno seguiría formando parte de la leyenda urbana de la familia Jone.

    Mientras tanto, Leslie realizó su viaje, explorando el vasto mar y encontrándose con diversas criaturas marinas. Pero siempre recordaba a Saturno, el tritón que una vez consideró su mascota.

    Aunque su deseo de ser devorado por Saturno persistía, subyugado por su amor por el océano y su deseo de entender a sus habitantes, Leslie siguió adelante.

    Y así, la historia de Leslie Jone, su obsesión con Saturno y su viaje para comprender las criaturas marinas se convirtió en una nueva leyenda urbana de la ciudad.

    A través de los años, la historia fue contada una y otra vez, añadiendo más capas a la misteriosa reputación de la familia Jone, con Leslie y Saturno en el centro de ella.

    A pesar de los peligros y la obsesión de Leslie, la lejana figura del tritón Saturno en su pecera se convirtió en un símbolo perdurable de la enigmática familia Jone.

    Y aunque Saturno ya no estaba presente en la mansión, su recuerdo y la sombra de su figura enigmática seguían siendo parte integral de la historia peculiar de la familia Jone.

    Aún hoy en día, cuando la gente visita la gran mansión Jone, no pueden evitar recordar la historia de Leslie y su amado tritón, contribuyendo aún más a la leyenda urbana que rodea a la familia.

    En el corazón de todo, la historia de Leslie y Saturno es un recordatorio de la extraña y fascinante relación entre humanos y criaturas marinas, y de cómo las obsesiones pueden conducir a caminos insospechados.

    Leslie Jone y su amado tritón, Saturno, continuarán viviendo en la memoria de la gente, y su historia seguirá siendo una intrincada pieza en el enigma que envuelve a la familia Jone.