
El Científico de las Algas
By Marilu Acevedo

19 Mar, 2024

Augusto Aldave Pajares, un niño lleno de sueños y con un amor innato por la ciencia, siempre soñó con convertirse en un gran científico.

Se destacó en la escuela, obteniendo siempre las mejores calificaciones. Su pasión era tan grande que decidió estudiar farmacia y bioquímica.

Augusto se graduó con honores y dedicó toda una vida al estudio de las algas. Su dedicación y esfuerzo le permitieron viajar a Alemania becado.

Allí, descubrió una nueva especie de alga que, en honor a su descubrimiento, lleva su nombre.

Escribió muchos libros y artículos dando a conocer el potencial del alga cushuro, que crece en las lagunas altoandinas del Perú.

Augusto luchó incansablemente para dar a conocer el alga Nostoc o cushuro, que puede ser utilizada para combatir la anemia y la desnutrición.

Fue nombrado rector de la Universidad Nacional de Trujillo, donde continuó su labor de investigación y divulgación del alga cushuro.

Recibió el Premio Hipólito Unanue por su contribución a la ciencia y su lucha por mejorar la salud de la población a través de su investigación.

La comunidad científica alemana reconoció su trabajo y le dedicó una estampilla en su honor cuando cumplió 80 años.

A pesar de sus logros y reconocimientos internacionales, el reconocimiento máximo del gobierno peruano y del Concytec nunca llegó.

Augusto Aldave Pajares murió sin recibir este reconocimiento, pero su legado perdura en cada alga que crece en las alturas del Perú.

Su historia es un recordatorio de que la pasión y la dedicación pueden cambiar el mundo, incluso si ese cambio se origina en algo tan pequeño como una alga.